sábado, 11 de diciembre de 2010

Parafraseando a Sabina..

  • No te bese cuando la luna me suguirio que era el momento.
  • La más puta de todas la señoras, la más señora de todas las putas.
  • Veinte años de mitos mal curados.
  • Veinte años hubiera yo tardado en contar los lunares de su espalda.
  • Que el calendario venga sin prisas.
  • Que gane el quiero la guerra del puedo.
  • Es mi atrcativo perenne.
  • Hay a quien le gusta lo grande.. pero yo prefiero lo pequeño.
  • Inquieto como un parroco en un burdel.
  • Que el otoño te dore la piel.
  • Riata no te revientes .
  • Se me ha olvidado el sitio de donde vengo y puede que no exista el sitio a donde voy. 
  • Puedo ponerme digno y decir toma mi dirección cuando te hartes de amores baratos, de un rato me llamas.
  • Ahora, cada día tiene su fruto
  • cada noche su secreto
  • y el tiempo es una mentira
  • que han inventado los viejos
  • He de enfrentarme al delicado momento de empezar a pensar.
  • Que para ser comercial, a esta canción le falta un buen estribillo.
  • A ti que has dirigido la fleha de Cupido a mi costado
  •  A veces pongo reservado el derecho de admisión.
  • Ahora...
  • Que sin saber, hemos sabido, querernos como es debido; sin querernos todavía.
  • Ahora, que no te pido, lo que me das.
  • Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño.
  • Y morirme contigo si te matas y matarme contigo si te mueres, porque el amor cuando no muere mata, porque amores que matan nunca mueren.
  • Errante como un taxi por el desierto, quemado como el cielo de Chernovil, así estoy yo sin ti.
  • Si me pierdo de vista esperadme en la lista de espera.
  • En naftalina conservó tus caderas el alcohol.
  • Al lugar donde has sido feliz es mejor que no trates nunca de regresar.
  • Al milagro de los besos robados que en el diccionario de mis pecados guardaron su pétalo azul.
  • ¿Dónde está la canción, que, me hiciste cuando eras poeta?
  • terminaba tan triste que nunca la pude empezar.
  • Tu lengua sale en todas mis pesadillas, tus uñas acribillan mi corazón, tus pechos dicen que eres una chiquilla,
  • tus muslos saben que eres mi perdición.
  • Tu risa es una lágrima equivocada, tu cama se inventó para no dormir.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Sinfonia No. 9 Op 125 en re menor

A mi inmaduro favorito en la Galaxia:


Recuerdo que muchas cosas me han dolido en la vida, pero no recuerdo un dolor parecido a éste, es curioso, se sufre de desamor, pero esto es diferente, es como un desamor a la inversa, 
Te recuerdo sonriendo o mirándome al dormir, no había experimentado esa sensación, me sentía delicada y admirada, era cómo si el viento pudiera quebrarme, y tú intentabas evitarlo.  Fueron más las tardes lejos que cerca, pero mientras el reloj lo permitía te resumía mi vida con detalles en pocos segundos, tal cómo tú lo hacías, me mostrabas la realidad vista a través de tus ojos y yo intentaba hacer lo mismo, yo con mi consumismo, tú con tus robots, todo lo imaginaba al revés.


No tengo queja alguna, tu cuidado y atención fueron perfectos, la distancia se rompió por momentos, todo era muy sencillo, los debates, las pláticas, las películas, los viajes, las risas, los corajes. Pero siempre ha sido así y se que volverá a serlo. 


Te quiero en mi vida, quiero tomar chocolate con pan, yo entiendo este abismo que debe abrirse, pero por favor prometeme que volverás. No me impidas verte sonreir, mi drama sólo no tiene sentido, ni los berrinches.


Esperaré sentada en algún rincón a que la cajita se llene y vengas a invitarme a jugar, bailes nuevamente conmigo y en la cara me vuelvas a besar. 


Gracias por este año como tu dices, tan interesante. 


Remacharemos con curitas el corazón, tú y yo tenemos un lazo aún más fuerte que nos une.. 

viernes, 3 de diciembre de 2010

Ganas tengo de...

Cuantas ganas tengo de aislarme un rato de esta vida, de introducirme en lo más profundo de mi ser y conocer quien habita ahí, rascar y escrudiñar su aislamiento.

El frío se ha hecho presente y con él nuevamente estas ganas de huir, de ti, de mi y de todos. Sentada en esta orilla del peñasco dónde observo desde lo alto, luchando con el viento que quiere tirarme, me siento poderosa, el silencio que brota me es muy agradable, incluso más que en la cama de rosas en la que me postras. 

Anhelo esta situación, este instante y toda la confusión que pueda desatar, respiro, sonrío y no temo volver a empezar. 

Será cierta condición que así me forjó, será simplemente elección meditada. 

Ganas tengo de conocer lo que desconozco, de escuchar lo que me alienta, de mirar lo que me aleja, de vivir a tu lado un rato soledad...